Como regla general, operar un motor a más de 10 °C por encima de la clase de aislamiento nominal del motor puede reducir la vida útil a la mitad. El calor excesivo acelerará la degradación del sistema de aislamiento de un motor. El calentamiento de un motor puede ser causado por una sobrecarga, arranques demasiado frecuentes, temperatura ambiente alta, por nombrar algunos.
Por ejemplo, un motor con un sistema de aislamiento clase F tiene una clasificación de 155°C. Si el motor supera esta temperatura más de 10°C, entonces la vida útil del sistema de aislamiento puede reducirse a la mitad.